La Organización Mundial de la Salud (OMS) nos recomienda beber al menos 2 litros de agua al día. No siempre es fácil medir cuánta agua bebemos, pero las jarras de agua con filtro nos ayudan a hacernos una idea de lo que bebemos. Nos ayudan a mejorar la calidad del agua del grifo, ofrecen un agua sin contaminantes y tienen un excelente precio. A continuación, vamos a descubrir las muchas ventajas de las jarras de agua con filtro y responderemos a la pregunta que se hacen muchos usuarios: ¿cada cuánto has de cambiar el filtro de la jarra?
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Ventajas de las jarras de agua con filtro
Uno de los puntos a favor de estas jarras es la comodidad respecto a otros mecanismos de filtrado de agua. No tienes que instalarlas; tienen un tamaño inferior al de las garrafas, que te permite guardarlas sin ocupar demasiado espacio también en la nevera; y son portátiles. Puedes sacarlas a la mesa sin problema, te las puedes llevar a tu segunda residencia, etc. Este agua tiene múltiples usos, ya que, además de para beber, también puedes utilizarla para cocinar o preparar tus infusiones con un líquido de más calidad que el del grifo.
La presencia del filtro te viene bien, entre otras cosas, para eliminar los virus, parásitos o bacterias que pueden existir en el agua, sin tener que recurrir al cloro. A largo plazo, el cloro puede provocar cáncer de colon o vejiga, además de problemas hepáticos. Los filtros también eliminan el fluoruro, que puede ser cancerígeno o dañino para las encías (aparte de suprimir los plaguicidas o metales pesados que puedes encontrar en el agua subterránea). Al no encontrar presencia de cloro o bacterias, disfrutas de un agua de mejor sabor.
Otro aspecto a tener en cuenta es que reducen el riesgo de enfermedades gastrointestinales. La razón es la misma: la eliminación de las bacterias que encontramos en el agua potable. Tampoco puedes perder de vista que las jarras de agua con filtro son muy fáciles de limpiar y, más allá de cambiar los filtros cuando corresponda, no exigen mucho mantenimiento.
¿Cuándo tienes que cambiar el filtro de tu jarra de agua?
Los filtros de las jarras no son eternos. Tienen una vida útil y hay un momento en el que empiezan a perder propiedades. Sin embargo, no es fácil establecer una duración concreta, dado que, en la mayoría de casos, depende de la calidad del agua de tu ciudad. Cuanto más dura sea, antes tendrás que cambiar de filtro. Lógicamente, el uso que des a la jarra también influye en el desgaste del filtro. Según el filtro, hay quienes recomiendan cambiarlo cada cuatro semanas o dos meses. Cada filtro indica su duración, aunque, por el sabor y aspecto del agua, sabrás cuándo hay que cambiarlo.
En resumen, las jarras de agua con filtro son unas excelentes alternativas a otros sistemas de filtrado de agua. Mucho más cómodas, te garantizan un agua de calidad y únicamente tienes que estar atento al momento de cambiar el filtro. Una solución muy económica para beber la mejor agua.